Productividad Personal: todo lo que necesitas saber para mejorar tu desempeño.
Una duda que siempre lleva a la confusión, es diferenciar que es la productividad y la productividad personal. Ahora bien, la productividad son todos aquellos recursos disponibles para adquirir un bien o un servicio en un tiempo determinado, es decir, adquiriendo un mejor rendimiento con pocos recursos necesarios. El cual, permite conocer cuánto produce un empleado en una hora, días o meses.
En lo personal, son aquellas tareas o actividades que hacemos día a día, en un determinado tiempo, trazando nuestros objetivos, utilizando recursos para obtener buenos resultados.
Por lo tanto, la productividad viene dada por aquellas características como son todos aquellos recursos disponibles: el tiempo, el conocimiento, la eficiencia, el rendimiento, las habilidades, la creatividad, la constancia, las técnicas para realizar bien las actividades y lo más importante, elegir la actividad adecuada, ya que debemos priorizar esas tareas, ¿Cómo? Planificarnos, haciendo las cosas bien estructurada.
Ahora si ¿Qué es la productividad personal?
La productividad Personal, es aquella persona que realiza tareas útiles, logrando en ella el tiempo determinado y la calidad necesaria para lograr los objetivos obtenidos
Así mismo, podemos decir que somos capaces de procesar, organizar de manera efectiva información. Es por ello, que se debe trazar un plan de acción, debemos enfocarnos en los conocimientos, tener una formación y las herramientas adecuadas que ayuden a poner en práctica todos estos conocimientos adquiridos.
La clave secreta para tener una productividad personal es concentrarse en la actividad más importante, si realmente quieres alcanzar tus metas y objetivos tienes que lograrlo, sin importar los días, los meses, el tiempo que tengas que hacerlo.
¿Cuáles son los consejos útiles para ser más productivo?
Para hacer más productivos y mejorar tu desempeño se debe tomar en cuenta los siguientes consejos:
- Elabora una planificación un día anterior: Un día anterior anotas en tu agenda, todo lo pendiente para el día siguiente, planifica lo que se va a hacer, así no pierdes tu tiempo y de esta forma haces que tu mañana sea tranquila y llevadera.
- Levántate temprano lleno de mucha energía: Al levantarse temprano notaras el rendimiento, te concentrarás mejor en tus objetivos y resultara más efectivo y recomendable, aprovecharas tus horas del día, además tendrás mucha energía para realizar tus actividades.
- Prioriza tus tareas: Realiza los pasos a seguir para alcanzar los objetivos. Busca una agenda y así puedes avanzar con las tareas más importantes. Enfréntate a las tareas más difíciles. Tratar de no cometer errores; esto se logra con buenas condiciones, siempre estar activo, en movimiento ante cualquier actividad que se te presente.
- Ordena tu oficina: Es más fácil encontrar las cosas cuando hay orden, pues facilita tu desempeño, si se encuentra desordenado pasaras horas encontrando el documento.
- No te distraigas: Recuerda que existen las tecnologías de comunicación y hay que saber usarlas correctamente, evita distraerte y has tu trabajo eficientemente.
- Firmeza y Perseverancia: Es necesario estar siempre constante de algo que ya se comenzó y no abandonar o postergar. La constancia de hacer las cosas bien hechas es la clave para nuestra vida personal y profesionalmente.
- Alcanzar el éxito: Realizar las tareas bien hechas, mejorando cada día, con mucha aptitud y constancia, tomando las decisiones adecuadas y lo más importante: si lo que haces te gusta, recuerda: ¡el éxito depende de nosotros mismos!
- No hagas solo tu trabajo: En algún momento tienes que delegar el trabajo a alguien, recuerda hay tareas que no son importantes en el momento, hay que dedicarles su tiempo necesario, reparte esas actividades que no son tan urgidas a tu equipo de trabajo.
- Descansa: Dormir las horas necesarias, ayuda a mantener nuestro cuerpo con mucha energía, si no duermes traerá muchas consecuencias, como por ejemplo: enfermedades, ansiedad, cansancio, dificultad para realizar las tareas más cotidianas. Diariamente se debe tener una serie de hábitos, por ejemplo: relajarse, darse un baño, cenar, apagar el celular, estas medidas ayudan a dormir relajadamente y ayudan a mejorar tu rendimiento en el trabajo.
